La Vida en el PCOI: Construyendo Confianza y Colectivos Comunistas


Gqeberha, Sudáfrica, 2025

GQEBERHA (Sudáfrica), 18 de agosto– “No sé cómo decirlo, pero parece que cuanto más haces algo, más aprendes. Cuando asisto a las reuniones, aprendo después y tengo la confianza para hablar con la gente sobre el comunismo. Generalmente, no la tengo y no sé cómo convencer a la gente”, dijo una camarada que asistió a nuestra reunión colectiva del domingo en Uitenhage.

Fue una reunión muy productiva. Ocho camaradas participaron con entusiasmo en las discusiones destinadas a fortalecer el partido y reclutar a más trabajadores para que se unan a nuestra lucha contra el capitalismo.

“Camaradas, hoy queremos hablar sobre nuestros obstáculos y las cosas que te frenan”, comenzó un camarada. “Estoy seguro de que todos aquí tienen algo que les impide reclutar más personas para el partido. Leeremos dos artículos en la última edición de Bandera Roja”.

Leímos “Un Nuevo Periódico Comunista para un Nuevo Mundo Comunista” y “Liderazgo Comunista” (sobre contradicciones internas y oportunidades). Los camaradas escucharon atentamente mientras dos estudiantes de secundaria leían por nosotros.

Luego nos preguntamos qué nos frena. Uno dijo, “para mí, es la confianza, camarada. A veces hablo con mis amigos y gente de mi entorno. Todos dicen que, si el comunismo se establece, sería genial. Pero no lo ven posible, dado el mundo actual, donde nos peleamos por las cosas más pequeñas”.

Discutimos cómo podemos ganar confianza, tanto individual como colectivamente. Un camarada dijo: “La única manera de generar confianza es leyendo el periódico y hablando del comunismo en nuestro colectivo. No solo en las reuniones, sino en nuestras interacciones diarias. El comunismo debería formar parte de nuestro lenguaje cotidiano”.

Para asegurarlo, este colectivo se reunirá dos veces al mes para debatir los artículos de Bandera Roja y los acontecimientos que ocurren en todo el mundo.

Como dijo una camarada: “Cuando hacemos algo y lo repetimos, así es como aprendemos”.

Camarada Z dijo: “En efecto, camaradas, aprendemos con la práctica. A veces el aprendizaje y el cambio no son evidentes, pero se ve la diferencia. Cuando no hay una lucha colectiva, tendemos a estancarnos”.

Camarada C respondió, “recuerdo cuando la camarada Q me presentó el comunismo y el PCOI, de un mundo sin dinero. No entendí nada. Lo intentó, pero aun así no entendía. Es más, no estaba de acuerdo en absoluto con ella. Pero mírenme ahora”.

Continuó, “fue porque empecé a asistir a reuniones donde otras camaradas explicaban lo que significaba el comunismo que empecé a ver la luz. Incluso ahora, cuando pasa mucho tiempo sin que nos reunamos, empiezo a tener dudas. Por eso, camaradas, debemos reunirnos regularmente para que podamos crecer”.

Planeamos reunirnos para hablar sobre el comunismo y los artículos de BR cada dos semanas, comunicarnos entre reuniones por WhatsApp y empezar poco a poco reclutando a personas cercanas, como familiares y amigos. Cuando lo hagamos habitual, tendremos aún más confianza para reclutar a cientos de personas en nuestras vecindades.

Lee Nuestro Folleto: “Movilizar a las Masas para el Comunismo”

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