El Colectivo es Crucial aquí ♦ La Revolución Se Sirve Caliente aquí ♦

Carta: El Colectivo es Crucial
La consistencia es clave para el éxito de un partido. Construir y mantener relaciones sólidas con los camaradas y las masas es crucial para el progreso y la solidaridad de los colectivos.
He vuelto por demanda popular de los camaradas. Debo ser autocrítica y asumo toda la responsabilidad de mi ausencia durante unas semanas. Los camaradas me cuidaron y no me dejaron sola. Eso me da la fuerza para construir el partido de una manera mucho mejor. Me di cuenta de que estaba trabajando sola. Ahora entiendo que el colectivo es crucial para que todos piensen y actúen de forma comunista.
Con visitas constantes, visitas puerta a puerta, distribución y lectura de Bandera Roja, compartir ideas como colectivos es lo que hace crecer y seguirá haciendo crecer al Partido.
Cultivar relaciones basadas en la confianza, la transparencia, la empatía y un propósito compartido fortalece al partido no individualmente, sino en lazos colectivos.
Siempre hay que dejar espacio para el rechazo, y eso nunca debe desanimarte a seguir saliendo, difundiendo el mensaje y luchando por el comunismo. Hay días buenos y malos, y durante esos días malos (rechazo, muchas preguntas abrumadoras, insultos) todo es una curva de aprendizaje. Como dicen en el comercio minorista, “tratar con un cliente difícil”, pero no renuncias a tu trabajo por eso. Al contrario, mejoras cada día al tener que lidiar con eso.
Lo mismo ocurre con la lucha por el comunismo. Es una montaña rusa. Mejora cuanto más distribuyes, más gente conoces, reuniones regulares, leer y escribir para Bandera Roja.
LA CONSISTENCIA es Clave. Saludos rojos, camaradas
Aluta continúa.
—Camarada en Sudáfrica
Carta: La Revolución Se Sirve Caliente
En esta época en la que en Occidente (Los Ángeles EE.UU.) solo se permite decir lo que se piensa cuando se está de acuerdo con la derecha. Las cenas en casa de mis camaradas sirven como un escape mental donde podemos dejar fluir las ideas libremente y debatir opiniones y verdades con deliciosa comida y bebida. Personas de entre 20 y 70 años se han unido a estas cenas para compartir sus experiencias y perspectivas del mundo. Ha sido fascinante aprender sobre camaradas de otros países como Sudáfrica y sobre diferentes revoluciones de la historia reciente. Escuchar anécdotas de camaradas del siglo XX que ya no están con nosotros y sus contribuciones. Aprender qué debemos hacer los jóvenes comunistas para continuar el trabajo y lograr la revolución en nuestra vida.
Ha sido revitalizante asistir y sentirme tan bienvenida en una mesa y sentarme con camaradas que no conocía antes de esa noche, sabiendo que aquí estamos a salvo.
Nuestra anfitriona ha viajado por todas partes para apoyar la agenda comunista y nos trae un pedacito del mundo a la mesa con su deliciosa cocina. Se ofrecen comidas de Palestina e India, a menudo acompañadas de pasta o pollo asado. Los camaradas traen bebidas, pan, postres y fruta.
Gracias a estas fiestas, he forjado lazos más profundos con camaradas de todo el condado de Los Ángeles. Me he dado cuenta de que somos más de lo que pensaba. En Estados Unidos no suele ser bien recibido que se hable de la ideología comunista, pero Bandera Roja ha servido para romper el hielo con personas que de otra manera no habrían interactuado.
Charlamos y reímos. Aprendemos sobre IA, intercambiamos historias sobre la inmigración y nuestras familias, compartimos nuestras carreras y cómo se alinean con nuestros valores. Hablamos de políticos y nos informamos mutuamente sin ponernos a la defensiva. Brindamos espacio sin juzgar a quienes puedan tener menos formación sobre un tema.
Porque, a través del comunismo, se construye la comunidad. La seguridad y el amor se forjan a fuego, sabiendo que una vez más estamos siendo perseguidos activamente por ambos bandos en Estados Unidos, donde la idea general del comunismo es “comunismo es cuando no hay iPhone” y los políticos usan la palabra a diestra y siniestra para intentar degradar a sus oponentes.
Pero la tensión política solo refuerza la idea de que la comunidad es necesaria. Así que, mientras giramos alrededor de la mesa, espero traer a más personas conmigo para la revolución.
—Sunflower (Girasol)
