En Guerras Imperialistas No Tenemos Lado aquí ♦ Imperialistas Se Pelean Para Explotar a Los Mineros aquí ♦
En Guerras Imperialistas No Tenemos Lado, Sólo El Lado De La Clase Obrera
SUDÁFRICA, 11 de febrero— Trece soldados sudafricanos fueron asesinados en las últimas semanas en la República Democrática del Congo (RDC), en una ciudad llamada Goma. Asesinados por rebeldes del M23 respaldados por Ruanda, que cuenta con el apoyo de Israel mediante el suministro de armas.
“No sabemos por qué nos están sacrificando tan lejos de casa”, comentó un amigo del PCOI que estuvo desplegado en el Congo hace unos meses. “Ni siquiera estamos debidamente equipados”.
Un camarada amigo le dijo a este soldado: “No debes sacrificar tu vida por Ramaphosa y De Beers. Deberíamos luchar por gente como nosotros, los que dejas en casa, nuestra clase. Por eso te insto a que siempre leas nuestro periódico y hables de ello con otros soldados”.
Soldados sudafricanos están desplegados en el Congo por la Comunidad de Desarrollo de África Austral bajo el pretexto de mantener la paz. Pero, no están allí necesariamente por eso. Están allí para proteger los intereses comerciales de la clase dominante contra otros rivales imperialistas. Soldados sudafricanos han entrado y salido del Congo durante las últimas dos décadas. En ese tiempo, las empresas sudafricanas, en particular las mineras, han importado una gran cantidad de minerales de la RDC y han recibido licitaciones de las élites gobernantes del Congo.
Los soldados sudafricanos han estado muriendo en el Congo desde entonces a instancias de la élite gobernante. Es sólo ahora que ha muerto un número significativo que los vemos en los titulares, junto con el hecho de que los rebeldes del M23 han ganado terreno significativo en una región rica en tierras raras.
Distintos imperialistas compiten por esas tierras raras. Están dispuestos a sacrificar las vidas de nuestros hermanos y hermanas para poseerlas. El régimen de Kagame en Ruanda, la RDC, Angola y Tanzania, junto con Sudáfrica, no están dispuestos a renunciar a sus ganancias. Esto ha dado lugar a una disputa pública entre Ruanda y Sudáfrica, en particular entre Ramaphosa y Kagame, en la que ambos amenazan guerra. A medida que esta rivalidad crece, hay llamamientos a que Sudáfrica se vengue, mientras que las élites gobernantes llaman a los sudafricanos a ser patrióticos.
Nosotros llamamos a nuestros hermanos y hermanas militares a que sean leales a la clase obrera, volteando sus armas contra la clase dominante y luchando por el comunismo en lugar de las ganancias económicas de los ricos capitalistas.
El amigo soldado citado anteriormente es uno de los miles que tenemos que reclutar para nuestro partido. Los soldados no deben ponerse del lado de los imperialistas, sino al lado de nuestra clase obrera internacional.
Acordamos que continuaremos esta conversación. Él puede ver por lo que luchamos. “Esto de luchar por la bandera es una tontería”, dijo. “Simplemente estamos muriendo por nada”.
Instamos a todos los soldados en todas partes a que rechacen “morir por nada” y, en cambio, luchen contra el sistema que quiere sacrificarlos por ganancias. Queremos que luchen por la revolución comunista.
Imperialistas Se Pelean Para Explotar Mineros Por Minerales Escasos
Biden visitó Angola justo antes de que Trump se convirtiera en presidente. Quería reforzar el apoyo a un proyecto de infraestructura de 56,000 millones de dólares entre EE. UU. y Europa, el “Corredor Lobito”, que conectaría Zambia, la República Democrática del Congo (RDC) y Angola. Angola apoyó durante mucho tiempo a Rusia y China, pero ahora sus gobernantes codician este lucrativo corredor de Lobito financiado por EE. UU.
La ciudad portuaria angoleña de Lobito transferiría miles de millones de dólares en minerales como cobalto y cobre. Minerales que se usan en vehículos eléctricos, teléfonos móviles, paneles solares y productos electrónicos. También en aleaciones para la industria aeroespacial y de defensa.
El gran obstáculo es que Ruanda se rehúsa a participar. Ruanda y la RDC tienen minas de cobalto. La Iniciativa del Cinturón y la Ruta de China está contrarrestando el corredor de Lobito. El presidente de Ruanda ha cambiado de bando: de aliado de EE. UU. a partidario de China. El año pasado, encabezó la delegación más grande que se reunió con Xi de China.
El reciente estallido de guerras imperialistas entre la República Democrática del Congo y el M23 (apoyado por Ruanda) se debe al control de minerales cruciales. Miles de personas han muerto y millones han sido desplazadas. En estas minas se explota a niños de tan solo doce años. Trabajan más de dieciséis horas al día para que algunos capitalistas (chinos, estadounidenses o europeos) saquen ganancias.
Los capitalistas chinos obtienen el 70% del cobalto producido en la República Democrática del Congo. El resto va a Tesla, Google y Microsoft.
Los imperialistas solo están interesados en obtener ganancias máximas no tienen fronteras ni lealtad. Cambiarán de bando y se sabotearán entre sí, creando corrupción, guerras y genocidios sin fin.
África tiene una rica historia de lucha anticolonial y antiimperialista, luchando contra los opresores coloniales y los imperialistas. Sin embargo, la lucha debe ser para terminar con el capitalismo, no para reformarlo para el capitalismo de Estado o el nacionalismo. El PCOI está organizando soldados para luchar por la clase obrera y la revolución comunista.