Masivas Protestas Contra La Guerra Sacuden Israel: Multitudes Acogen Periódicos Comunistas, Colectivo del PCOI Crece
TEL AVIV (Palestina/Israel), 31 de marzo— “Las masas en Israel están disgustadas, horrorizadas y dispuestas a hacer lo que sea para cambiar el sistema”, dijo un camarada tras marchar entre cientos de miles de personas en ciudades de todo Israel. La policía sionista no es rival para la ira de las masas, informó. Estamos distribuyendo Bandera Roja abiertamente.
Diez camaradas de Tel Aviv distribuyen Bandera Roja mientras participan sin parar en las marchas casi diarias. La cantidad de personas crece. La ira en las calles ha alcanzado un punto álgido que estremece al régimen de Netanyahu.
“Cuando nos acercamos a la multitud en las calles, agarran Bandera Roja y nos saludan con un gran pulgar hacia arriba”, informa el camarada. Gritan: “¡Revolución comunista!”. “¡Ahorquen a Netanyahu!”.
A las masas de Gaza les gritan: “¡Nunca serán olvidados!”. Y a Netanyahu y Hamás: «¡Dictadores, ladrones, deben estar en la cárcel!».
Las manifestaciones ya no se limitan a los estudiantes universitarios. Familias acuden con niños. Personas de ochenta años se enfrentan valientemente a la policía exhausta que intenta desesperadamente disparar un cañón de agua. Les sale el tiro por la culata. La policía montada intenta controlar la situación. Las masas se agolpan, jóvenes y mayores. Esto ocurre a diario mientras la «Fuerza de Ocupación Israelí» asesina brutalmente a niños, mujeres y hombres que se refugian en albergues temporales.
Los camaradas del PCOI acuden a las masas y hacen muchísimos contactos. «Cuando vemos pancartas que dicen ‘Liberen a los rehenes ya'», nosotros decimos, «nuestro lema es ‘¡Comunismo ya!'».
Los camaradas se reúnen en un pequeño apartamento en Tel Aviv. Antes, las reuniones eran de seis a ocho camaradas. Ahora, la sala está llena de gente. Todos vienen de las manifestaciones. Tienen el ánimo por las nubes. Cada uno habla y da su opinión. Las reuniones pueden durar más de seis horas sin interrupción.
Un camarada dijo que en 1871 un gobierno obrero revolucionario tomó el poder en París. Si nos organizamos por el comunismo ahora, podemos tener la Comuna de París en docenas de ciudades de todo el mundo. Las masas rechazan el capitalismo desde Teherán hasta París, desde Tel Aviv hasta Los Ángeles. Debemos luchar y construir nuestro partido para ofrecer una alternativa y una visión claras del comunismo. Tenemos que tener confianza en que ganaremos. Eso significa ganar a nuestros amigos, vecinos y a las masas en movimiento.
Vemos que las masas en las calles de Israel son iguales a las masas de París, Londres, Berlín, Saná, Teherán y Goma. Estamos unidos en nuestro deseo de cambio. Cada vez somos más los que nos damos cuenta de que el verdadero cambio vendrá de poner fin a los horrores del capitalismo.
Cuando los camaradas de Gaza puedan levantar la bandera del comunismo en la parte más brutalizada del mundo, nos levantaremos, ganaremos confianza. Los camaradas de Sudáfrica han abrazado el comunismo. Eso nos inspira más allá de lo imaginable.
Como dijo un camarada allí: “Hoy podemos ser una gota en el océano, pero mañana seremos el océano del comunismo”. Estas pequeñas gotas se están expandiendo para convertirse en lagos, ríos y océanos de comunismo.
Asegurémonos de que este Primero de Mayo sea una firme afirmación para acabar con el capitalismo y establecer un comunismo igualitario donde los bancos y los multimillonarios no tengan cabida en el mundo. Las masas de la humanidad construirán un futuro comunista. ¡Despleguemos banderas rojas por todo el mundo!
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