El Capitalismo Crea Crisis de Refugiados: El Comunismo Las Acabará


Londres (Reino Unido), marzo de 2015

El Capitalismo Crea Crisis de Refugiados: El Comunismo Las Acabará

12 de abril: Los imperialistas fascistas chinos intensifican la militarización y la retórica beligerante hacia la pequeña isla de Taiwán. Están acelerando sus planes de invadir y anexar Taiwán para contrarrestar a los imperialistas estadounidenses. Algunas fuentes predicen una posible invasión ya en 2027.

Una invasión militar de Taiwán matará a soldados de la clase trabajadora de ambos bandos, destruirá infraestructuras, infligirá traumas psicológicos y asesinará y desplazará a innumerables familias taiwanesas de la clase trabajadora que residen cerca de posibles zonas de guerra. La clase trabajadora se empobrecerá y la clase capitalista se enriquecerá. Los soldados y marineros estadounidenses de la clase trabajadora estacionados en Taiwán también correrán el riesgo de morir en la guerra imperialista.

La ayuda militar del imperialismo estadounidense a los capitalistas taiwaneses, con el pretexto de apoyar la democracia, sirve para intensificar aún más las tensiones. Esta ayuda beneficia principalmente a los contratistas de defensa y al complejo militar-industrial, desviando recursos que, de otro modo, podrían abordar problemas sociales como la atención médica, el desempleo y la falta de vivienda. La clase trabajadora sufre las consecuencias de esta militarización, tanto por la asignación de fondos públicos desviados de servicios esenciales como por la posibilidad de verse arrastrada a otra guerra imperialista prolongada.

Para agravar la crisis imperialista, se encuentran las deportaciones abiertamente fascistas del imperialismo estadounidense de trabajadores inmigrantes, turistas, estudiantes internacionales e incluso (Trump espera) ciudadanos estadounidenses. Los gobernantes fascistas estadounidenses se esfuerzan más que nunca por dividir y aterrorizar a la clase trabajadora mediante el racismo extremo, el nacionalismo, el nativismo y la xenofobia, mientras el imperialismo estadounidense en declive se enfrenta al auge del imperialismo chino y ruso. Asimismo, fomentan el racismo contra los trabajadores de origen chino mientras se preparan para enfrentarse a su principal superpotencia rival.

Dado el nivel actual de fascismo de los imperialistas estadounidenses, a muchos refugiados taiwaneses obligados a abandonar sus hogares por una invasión china se les podría negar la entrada a Estados Unidos y ser deportados a Taiwán para enfrentar la muerte y la destrucción. Aunque el gobierno estadounidense envía ayuda militar al gobierno taiwanés para competir con sus homólogos capitalistas chinos por Taiwán, el imperialismo estadounidense y otros gobiernos capitalistas no salvarán a los refugiados taiwaneses. Todos los capitalistas imperialistas son cómplices de este desastre fascista. A ningún capitalista le importan realmente las vidas de los trabajadores.

Los capitalistas imperialistas de todos los países luchan a muerte por el control territorial y la acumulación de beneficios. Los terroristas fascistas Putin y Netanyahu ya han bombardeado y asesinado en masa a decenas de miles de trabajadores en Ucrania y Palestina, y han desplazado a millones más. El dictador fascista ucraniano, Zelenski, también ha lanzado varios ataques terroristas contra territorio, edificios y civiles rusos. Millones de familias trabajadoras ya han sido desplazadas, y más familias lo serán cuando Xi Jinping invada Taiwán y asesine a trabajadores taiwaneses.

Las organizaciones de derechos humanos, procapitalistas, luchan por reformas y nunca pondrán fin a la crisis internacional de refugiados creada por el capitalismo-imperialismo. El sistema capitalista-imperialista librará guerras sin cesar para asesinar a los trabajadores con el fin de obtener las máximas ganancias y crear más poblaciones de refugiados.

Solo hay una solución. Necesitamos llamar a los trabajadores, soldadxs y marineros de Taiwán, China continental, Estados Unidos y el resto del mundo a unirse y ayudar a construir el PCOI. Juntos debemos combatir el racismo, el nacionalismo, la xenofobia y todas las divisiones. Una vez que los soldadxs y marineros se movilicen para el comunismo, las masas tomarán las armas y realizarán revoluciones comunistas en todo el planeta para aniquilar a todos los capitalistas e imperialistas, su esclavitud asalariada y sus ganancias.

Luchamos directamente por un mundo comunista sin naciones, fronteras ni guerras imperialistas. En el comunismo, ningún trabajador será expulsado de su hogar ni deportado. La producción y el trabajo se basarán únicamente en satisfacer las necesidades de todos, no en las ganancias ni los salarios. Nadie vivirá mejor ni peor que otro. Las masas comunistas lucharán contra los vestigios de las divisiones nacionalistas racistas. Los niños en la sociedad comunista crecerán aprendiendo a tratarse como camaradas, hermanos y hermanas. Todos compartirán las responsabilidades de la sociedad y tendrán múltiples empleos. La tecnología científica en el comunismo se utilizará no para las ganancias capitalistas, sino para mejorar la vida y el bienestar de todos los trabajadores del mundo.

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