SUDÁFRICA—Justo el otro día, después de distribuir Bandera Roja a obreros industriales en la industria automotriz, pasamos por donde estaban tres autos incendiados, incluyendo un autobús. Ellos fueron dañados por residentes furiosos, cerca de donde nosotros vivimos. Estaban furiosos contra el gobierno y los funcionarios municipales locales por la falta de “entrega de servicios”.
Cuando hablamos con algunos de estos airados residentes, nos explicaron que querían que el gobierno les construyera casas apropiadas porque han estado viviendo en casuchas durante las últimas dos décadas. El gobierno del CNA (Congreso Nacional Africano) les ha estado prometiendo construirles casas apropiadas. Pero nunca lo ha hecho porque dice que el hombre de negocios que posee la tierra donde quieren que sus casas sean construidas, está pidiendo demasiado dinero por la tierra y no quiere escuchar sus propuestas.
Desde entonces, el CNA ha sido sustituido en el municipio por el partido AD (Alianza Democrática), pero los residentes de Westville todavía viven en casuchas. No han visto mejoras en su situación, ni acciones tomadas por el AD para abordar el problema de vivienda que enfrentan. Esto demuestra que los partidos políticos electoreros no tienen interés en las necesidades de la clase obrera y de las masas.
En realidad, no les importan un bledo, excepto sus votos. La ira que muestran las masas de Westville es buena. Pero esa ira debe ser dirigida contra el capitalismo – el capitalismo que empodera a individuos para mantener a las masas como rehenes. Este mismo capitalismo los ha sometido a la pobreza, la falta de viviendas y las insoportables condiciones de vida que enfrentan como resultado de vivir en casuchas congestionadas donde, cuando hay fuertes vientos, se enfrentan a la perspectiva de quedarse sin techo o sin albergue.
Muchos en las masas están convencidos de que el problema es sólo el CNA (sus diferentes facciones y Zuma, el presidente). Se les dice que si sólo sacan al CNA del gobierno o si el CNA elimina a Zuma, entonces de repente los problemas causados por el capitalismo en Sudáfrica desaparecerán. Esta es la retórica de la mayoría de los medios de comunicación y de los partidos de oposición. Como resultado, votaron por el AD y EFF (Partido de la Libertad Económica, otro partido electoral) porque creyeron las mentiras que el AD dice acerca del llamado “cambio”. Ciertamente han visto el cambio de alcaldes, pero no el cambio en sus vidas diarias.
El cambio por el cual las masas de Westville deben luchar es por el cambio que verá al capitalismo destruido por la revolución comunista y el establecimiento de una sociedad construida y basada en las necesidades colectivas de la clase obrera. Las masas construirán casas para sí por sí mismas, casas que les sean convenientes, que sean apropiadas y de calidad para soportar las duras condiciones climáticas.
El comunismo será una sociedad donde nadie podrá impedir que cientos de personas tengan casas adecuadas para vivir. Es alentador ver la disposición de las masas de irse a la huelga demandando mejores condiciones de vida y enfrentarse a la policía estatal. Esto nos brinda la oportunidad de mostrar los horrores del capitalismo, pero no debemos convertirnos en mendigos que sólo se quejan con nuestros amos esclavistas. Debemos unirnos a la lucha contra ellos (capitalismo); debemos tratar de destruir las causas, no los efectos.
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