Bandera Roja ha señalado que la competencia entre capitalistas esta impulsando los acontecimientos en todas partes. La rivalidad entre EE.UU. y Rusia, China y la Unión Europea no se limita a guerras comerciales y sanciones; conduce a grandes guerras.
Estas guerras no siempre involucran a las fuerzas armadas de las grandes potencias. Hay guerras por terceros en las cuales las grandes potencias hacen que otros peleen por ellas. La CIA de EE. UU. trató esto; su mayor éxito fue armar a los yihadistas que luchaban contra la ocupación soviética de Afganistán en la década de 1980. La “Operación Ciclón” de la CIA entrenó y armó a afganos, eventualmente costándole a los EE. UU. unos 20 mil millones de dólares y produciendo enormes bajas afganas. Los soviéticos se retiraron; una sangrienta guerra civil siguió. El gobierno de EE.UU. contó esto como un gran éxito. Los yihadistas apoyados por EE. UU. incluyeron colaboradores cercanos de Osama bin Laden y ayudaron a crear a Al Qaeda.
En 2012, la CIA, junto con los saudíes y otros, armaron fuerzas sirias con el objetivo de eliminar el régimen de Bashir al Assad. En el otro lado, los rusos apoyaron el régimen de Assad. Al menos 500,000 sirios murieron en la lucha que creó millones de refugiados. Veamos como esta guerra por terceros se desarrollo.
Los rusos han tenido una base naval en Siria en Tartus desde 1971. Putin se reunió con Assad en 2005 y perdonó la deuda multimillonaria de Siria a Rusia. Desde 2007 hasta 2010, Rusia realizó grandes ventas de armas a Siria. En 2009, la base naval de Tartus fue dragada para que atracaran embarcaciones más grandes.
En marzo 2011, las protestas contra el régimen de Assad comenzaron en el sur de Siria y fueron brutalmente reprimidas. Los rusos bloquearon los intentos en la ONU de sancionar a Siria y, en 2012, proporcionaron armas a Siria, incluyendo helicópteros de ataque y armas antiaéreas.
En 2012, Arabia Saudita y la CIA contrabandearon armas a las fuerzas rebeldes sirias. En 2013, el proyecto de la CIA, “Madera de Sicomoro “, que operaba desde Amman Jordan, proporcionó armas de asalto, misiles antitanque, camionetas, etc. Los paramilitares de la CIA entrenaron a los combatientes sirios. Se estima que estos combatientes de la CIA mataron unas 100.000 tropas y aliados del gobierno sirio.
Tropas respaldadas por EE.UU. pelearon al lado del frente Al Nusra de Al Qaeda y les suministraron armas. Muchas armas pasaron rápidamente a manos de ISIS.
Después de que las fuerzas anti-Assad ganaran terreno en septiembre 2015, Rusia metió 48,000 tropas y tanques y desplegó los sistemas de defensa aérea rusos. Los ataques aéreos rusos debilitaron seriamente las fuerzas antigubernamentales y ayudaron al gobierno sirio a recuperar Aleppo y Palmira en 2016. Hezbollah y las tropas iraníes coordinaron sus ataques con los ataques aéreos rusos.
Un general ruso cuenta 71,000 ataques aéreos contra “la infraestructura de los terroristas”. Rusia realizó ataques con misiles de crucero desde submarinos en el Mediterráneo y barcos en el Mar Caspio y ataques aéreos desde un portaaviones en el Mediterráneo.
En 2017, los EE. UU. descontinuaron Madera de Sicomoro.
En 2018, Rusia envió “contratistas” civiles para apoyar al gobierno sirio. Chocaron con tropas estadounidenses; Según reportes, la artillería estadounidense mató a cientos de “contratistas”.
La intervención militar de EE.UU. fracasó y el poderío estadounidense en Oriente Medio fue debilitado. Los rusos ganaron: ahora tienen una larga concesión de la base naval de Tartus, donde pueden colocar barcos y una presencia a largo plazo en la región. Las guerras por terceros pueden afectar la habilidad de las potencias imperiales de dominar regiones.
Todas las guerras de los capitalistas resultan en muerte y miseria para las masas.
No hay capitalismo pacífico. Las masas solo pueden hacer su futuro luchando por el comunismo donde no habrá dinero, ganancias, naciones, ni necesidad de dominar regiones y movilizará a las masas para satisfacer las necesidades de todos. Las masas comunistas necesitarán armas solo para garantizar que los capitalistas nunca recuperen el poder. Únete al PCOI y ayuda a forjar el futuro que las masas necesitamos.