India: Obreros Automotrices Organizan Lucha Contra Racismo Anti-Musulmán

Obreros indios del auto en huelga, septiembre del 2019

CHENNAI, INDIA— “Modi y su banda fascista están pidiéndole a la gente en Assam que demuestren que son ciudadanos de la India. Son musulmanes. Los fascistas han lanzado una campaña de limpieza étnica. No dejaremos que esto suceda”.

Estas son las palabras de un obrero automotriz en Chennai. “La última vez que RSS [un grupo fascista asociado con el gobernante partido BJP] vino a nuestro vecindario, los golpeamos y la policía no pudo hacer nada”, le dijo otro obrero automotriz a un miembro del PCOI que trabaja en la misma línea de ensamblaje.

Estos obreros y millones como ellos en la India están enojados y disgustados con la nueva ley llamada Registro Nacional de Ciudadanos (RNC) impuesta en el estado nororiental de Assam, India. Según la NRC, a cualquier persona, excepto los musulmanes, viviendo en la India por siete o más se le otorgará la ciudadanía india. Con la aprobación de la NRC, dos millones de residentes ahora han sido declarados “extranjeros ilegales”.

El gobierno afirma que quiere deshacerse de los extranjeros indocumentados de Assam. Amit Shat, el principal ministro de ministros, a cargo de la seguridad interna de la India, llamó a las personas indocumentadas en la India “termitas” que deben ser arrojadas en la Bahía de Bengala.

El estado de Assam, que también está gobernado por el BJP, ha construido enormes campamentos donde se alojarán los 2 millones de residentes antes de ser deportados. Todos los demás estados de la India gobernados por BJP quieren seguir el ejemplo de Assam. Las grandes ciudades ya están construyendo campamentos para reubicar a un gran número de trabajadores y sus familias.

La intensificación de los ataques fascistas contra los obreros musulmanes es también un reflejo del capitalismo en crisis. Todos los días, miles de obreros pierden sus empleos. Las ciudades se están convirtiendo en vaciaderos para obreros agrícolas desplazados buscando empleos inexistentes.

Culpando a los musulmanes, como “extranjeros indocumentados”, por los problemas creados por el capitalismo, los patrones tratan desesperadamente de dividir a la clase trabajadora. Este ataque es contra toda la clase obrera como hemos aprendido del surgimiento del fascismo en Alemania.

En respuesta a estos ataques fascistas contra obreros musulmanes, los miembros del PCOI, amigos y simpatizantes en las fábricas automotrices en Chennai hemos intensificado nuestros esfuerzos para reclutar más obreros a nuestro Partido. Dentro y fuera de las fábricas estamos distribuyendo nuestra literatura. Tres obreros se han unido al PCOI y muchos más están pensando en unirse.

He aquí una breve entrevista con uno de ellos.

Bandera Roja: ¿Qué te hizo decidirte ingresar al PCOI?

Lalam: Estaba muy perturbado viendo asesinatos de musulmanes. Son como nosotros. Mi amigo vino a mi casa con Bandera Roja. Él siempre dice que el capitalismo divide a los trabajadores. Necesitamos el comunismo para terminar con estas divisiones. Pensé en esto. Y acepté. He visto a otros partidos políticos que están contra los asesinatos, pero no quieren luchar por el comunismo.

Bandera Roja: ¿Hablas con otros sobre el PCOI y Bandera Roja?

Lalam: Sí, trabajo en la línea de ensamblaje. Producimos asientos para automóviles. Nuestro trabajo es muy duro y tenemos que trabajar rápido. Cuando trabajamos, no sabemos quién es hindú o quién es musulmán. Todos somos obreros. Al final del día, el jefe gana mucho dinero y nos vamos a casa cansados con muy poco para alimentar a nuestra familia. Durante mi almuerzo comencé a hablar sobre la solución comunista y la necesidad de construir para la revolución. Muchos obreros están de acuerdo. Es fácil para mí seguir hablando con mis vecinos sobre el comunismo porque ellos también trabajan conmigo.

Bandera Roja: ¿Puedes organizar una reunión de tus vecinos para hablar sobre el comunismo y el PCOI?

Lalam: El camarada Kaditula que me reclutó al PCOI está trabajando conmigo. El próximo domingo vamos a tener una reunión en mi casa. Hemos invitado a todos los vecinos. Podemos tener 100 o más personas. Explicaremos cómo construir una sociedad sin dinero y cómo esta sociedad comunista eliminará las fronteras, las “razas” y las naciones. En la sociedad comunista aprenderemos a crear y compartir todo lo que producimos.

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