Poster Soviético: Muerte a la Bestia Fascista (1941)
Luchemos para Reemplazar el Capitalismo con el Comunismo
Después de la masacre islamófoba en Nueva Zelanda, una amiga lamentaba que el odio y el divisionismo estén tan generalizados en el mundo.
“Creo que es más que odio y división”, respondió nuestro camarada. “Es racismo, sexismo y xenofobia (odio a los extranjeros), que el capitalismo siempre nutre. Pero conforme el fascismo se vuelve más necesario para los capitalistas, ellos elevan los niveles de estos a alturas mortales”.
“¡Exactamente!” Dijo ella. “Es casi un caso de libro de texto”.
Al día siguiente discutimos el manifiesto racista del terrorista neocelandés. Lo tituló “El gran Reemplazo” similar al titulo de un libro por el demagogo francés Renaud Camus. Camus argumenta que las mujeres europeas blancas deben tener más hijos. De lo contrario, Europa será rebasada por inmigrantes musulmanes del norte y la región subsahariana del África. La teoría de reemplazo prevalece en los partidos derechistas anti-inmigrantes europeos.
Las manifestaciones fascistas en Charlottesville (EE. UU.) hacían eco a esta línea. Los neo-nazis gritaban: “¡Los judíos no nos reemplazarán! ¡Los negros no nos reemplazarán! ¡Los inmigrantes no nos reemplazarán!” Luego uno de ellos atropelló a un contra-manifestante matándola.
“¡Es algo macabro!” declaró nuestra amiga. “¡Una mescolanza de racismo, sexismo y xenofobia!”
Eugenesia Racista: De EEUU a la Alemania Nazi
¿Es que Renaud Camus está tratando de revivir todo esto?
Esto nos permitió hablar mas del programa Lebensborn (fuente de vida) patrocinado por el estado nazi alemán. Las mujeres “arias puras” fueron elegidas para copular con oficiales Nazi para que salieran embarazadas. Los niños nacidos de estas relaciones eran enviados a familias “arias ejemplares”. Se estima que unos 20,000 niños “racialmente puros” fueron criados
Para el tercer día, nuestra amiga había hablado con más obreros. Su amiga intima se sorprendió al escuchar por primera vez acerca del programa nazi.
En realidad, muchos obreros en la planta no sabían de ello. Aún más relevante, es que muchos trabajadores, quienes suelen saber bastante acerca del racismo, sexismo y xenofobia, no han oído hablar del papel que la eugenesia estadounidense jugó en esta historia. Los grandes capitalistas como Rockefeller y Carnegie lo financiaron. Lideres claves como el profesor de Harvard, Charles B. Davenport, usaron las universidades elites como su tarima.
La eugenesia ayudó a justificar la Ley de Inmigración de 1924. Esta implementó cuotas favoreciendo a los inmigrantes del norte de Europa. Redujo drásticamente la inmigración de África y del sur y este de Europa, incluidos judíos e italianos. Paró la inmigración de Asia.
Estas políticas fueron elaboradas para contrarrestar lo que el presidente Theodore Roosevelt había llamado “suicidio racial” y la disminución de los descendientes angloamericanos. Complementaron los ataques contra los obreros inmigrantes, muchos de ellos socialistas o comunistas, que lideraban la lucha de clases.
El movimiento de la eugenesia decreció en EE.UU. durante la Segunda Guerra Mundial, cuando sus conexiones nazis se convirtieron en un estorbo. Sin embargo, el capitalismo racista pronto regeneró un nuevo movimiento eugenésico. Una vez más, sus principales voceros procedían de universidades élites. Esta vez, hubo más rechazo por parte de estudiantes y maestros inspirados por las rebeliones antirracistas masivas de obreros negros.
La Batalla en la Clase Obrera
La teoría del reemplazo refleja tiempos como los de los nazis. El capitalismo esta de nuevo en crisis. Muchos gobernantes en Europa, Estados Unidos y otros países quieren que las masas de trabajadores blancos y/o ciudadanos culpen a los inmigrantes (en particular a los de diferentes “razas”) por sus brutales ataques contra la clase obrera.
La ideología de reemplazo sirve para convertir los temores de la gente en un movimiento fascista. Como lo demuestra el manifiesto, contribuyó a la masacre de Nueva Zelanda. Pero también provocó en las masas una respuesta antirracista global.
Esta vez la lucha se centrará en la clase obrera. La batalla debe ser movilizar a esta para el comunismo.
Antes de la semana pasada, las conversaciones políticas con esta amiga en Boeing se limitaban a las críticas generales de Trump y la opresión de los patrones. La masacre de Nueva Zelanda y la ideología detrás de esta son más serias para ella.
Ella ya ha comenzado a luchar contra esta ideología fascista con muchos de sus compañeros de trabajo. Tomó una copia adicional del nuevo folleto de migración del PCOI para su amiga. Este folleto ha sido la primera cosa de la literatura del Partido que ha leído. Ayudará a vincular más claramente esta lucha antifascista a movilizar para el comunismo. Con ella y más como ella, podemos construir el movimiento comunista.
Las ideologías racistas, sexistas y xenófobas se nutren de este sistema y florecen como fascismo a medida que la crisis del capitalismo se profundiza. El comunismo es la única manera de poner fin al surgimiento y resurgimiento de estas ideas fascistas.
La Otra Cara de la Teoría del Reemplazo
Estudiantes en el colegio de Middlebury, USA, dan la espalda al profesor racista Charles Murray, Marzo del 2017
Las repercusiones de los movimientos eugenésicos en todo el mundo van más allá de la reproducción de la raza blanca. Han resultado en millones de muertes.
El movimiento eugenista de los Estados Unidos dio como resultado la esterilización de 64,000 personas (por discapacitación) en el siglo veinte. Su discapacidad era ser pobres, a menudo negros/as o latinos/as.
El programa de esterilización de California era tan amplio que los nazis acudieron a California para les aconsejara. Hitler orgullosamente admitió haber adoptado las leyes de varios estados de EE. UU. Todas permitieron la prevención de la reproducción de los “no aptos”.
Luego se dio el asesinato de 8 millones de personas en los campos de concentración.
Pero no terminó ahí. Los nazis utilizaron la ideología de lebensraum (espacio para vivir) junto con la de lebensborn. Lebensraum justificó el imperialismo alemán en la Segunda Guerra Mundial. Afirmaba que la raza aria necesitaba espacio para expandirse. Cualquier otra raza o nacionalidad “inferior” tenía que ser subyugada o eliminada en toda Europa.
La batalla por los corazones y las mentes de la clase obrera es verdaderamente una lucha de vida o muerte.