Movilizando Para el Comunismo en el Movimiento Antirracista: Ahora Es el Momento

Los Ángeles (EE. UU.) Los manifestantes exigen la abolición del Departamento del Sheriff de Los Ángeles

LOS ÁNGELES (EE. UU.) – “La policía estadounidense surgió de las patrullas para aterrorizar esclavos. Estas solo terminaron cuando se abolió la esclavitud. ¿Podemos abolir la policía hoy día sin acabar con la esclavitud asalariada racista? “

Una camarada le preguntó esto a una líder de Black Lives Matter en una reunión sindical sobre “desfinanciar” el contrato de la universidad con los (alguaciles) Sheriffs de Los Ángeles. La líder respondió que este es un “momento crítico” para lograr reformas policiales. Su grupo “cree en la abolición” pero promueve el “desfinanciamiento” como una “demanda que puede ser ganable”.

Las masas continúan marchando, manifestándose, debatiendo y organizando contra el asesinato policial racista. Esto a pesar del agravamiento de la pandemia del COVID-19, los ataques fascistas de las fuerzas federales y la presión constante del Partido Demócrata para que abandonen todo para promover las elecciones de noviembre.

Para los liberales, este es el “momento” de derrocar al Partido Republicano. Para algunos activistas, es el “momento” de presionar para lograr reformas antirracistas. Nosotros decimos que es el “momento” de agudizar la lucha política: reformismo versus revolución comunista.

Este es un momento – un período – donde abogando por el comunismo abiertamente y con principios puede ayudar al PCOI a crecer significativamente en tamaño e influencia.

Puede llevar internacionalmente a la clase, paso a paso, más cerca de ponerle fin a la esclavitud asalariada, en la que el racismo está profundamente arraigado. Más cerca de construir una red de relaciones sociales de camaradería basada en el compromiso de trabajar colectivamente y compartir según las necesidades. Más cerca a una sociedad comunista sin dinero, explotación, racismo ni policías.

¡No Solo en las Calles!

La reunión del comité sindical fue uno de los muchos eventos virtuales en los que la camarada y sus compañeros de trabajo han luchado por comprender y combatir el racismo. Hay “grupos de investigación”, clubes de lectura, reuniones públicas y más.

Muchos quieren hacer urgentemente cualesquiera cambios que podamos ahora. Por ejemplo, reducir las “microagresiones” que inadvertidamente se convierten en un asalto racista constante. Exponer y oponerse a las políticas educativas que pueden, sin querer, hacer que los estudiantes negros y otros se sientan no deseados.

Para los camaradas del Partido, es parte de convertirse en mejores comunistas. Mientras tanto, debemos aprovechar cada oportunidad para recordarle a la gente que poner fin al racismo exige la destrucción del capitalismo.

Publicamos enlaces a Bandera Roja y otra literatura del Partido en los chats de Zoom. Enviamos Bandera Roja a nuevos amigos y los invitamos a eventos virtuales del Partido. Nos volvemos mejores amigos para crear una base más sólida para una lucha política franca. En estos tiempos difíciles, buscamos nuevas y mejores formas de avanzar el comunismo.

“Si no hay policías, ¿entonces qué?” Muchos están pensando en “alternativas basadas en la comunidad” (reformas). Es una apertura para discutir cómo la sociedad comunista manejará los problemas sociales sin policías. Aún así, la sociedad comunista revolucionaria tendrá que lidiar con firmeza, a veces con violencia, con los racistas y otros enemigos de clase.

Luchemos por lo Que Necesitamos

Bandera Roja explica por qué la policía racista no puede abolirse sin una revolución comunista. Algunos están de acuerdo con nosotros en que el capitalismo debe desaparecer, pero aún creen que luchar por reformas es la forma de llegar allí. “Desfinanciar a la policía” ahora, “abolir la policía” más tarde, luego “socialismo”, y tal vez el comunismo en un futuro lejano.

Seattle (EE. UU.) Protestando asesinatos racistas policiales

El movimiento comunista internacional del siglo 20 siguió variaciones de esta estrategia. Subestimó a las masas. Dijo que “no estaban preparadas” para una línea comunista. A esto lo llamaríamos una política oportunista.

Hoy en día, algunos activistas creen en adoptar demandas “ganables”, por limitadas que sean. Aplauden a cada político que las apoya. El anticomunista Saúl Alinsky desarrolló este modelo para desviar a las airadas masas de la revolución.

Otros usan demandas “menos controversiales” como “desfinanciar la policía” para defender algo más radical (“abolir la policía”). ¿Creen ellos realmente que estas “demandas más avanzadas” son ganables?

Una vieja estrategia socialista es proponer un “programa máximo” que supuestamente satisface las necesidades reales de las masas, aunque los líderes saben que esas demandas no pueden lograrse en el capitalismo. Supuestamente eso debe provocar que las masas piensen en la revolución. Nunca funcionó.

El PCOI ha aprendido, del estudio y experiencia, que el socialismo no puede convertirse en comunismo. No hacemos demandas a los patrones, “ganables” o no ganables”. Exigimos de nosotros y de la clase obrera internacional: Prepararémonos para tomar y ejercer el poder comunista.

El comunismo se hace posible cuando las masas trabajan por ello consciente. Tenemos que aprender, a través de este trabajo colectivo, a organizarnos en base al compromiso y el compartir.

Esto es “movilizar a las masas por el comunismo”. Es lo que llevamos a las masas antirracistas, en las calles, en el trabajo y en las comunidades. Es lo que esperamos que elijas para ingresar.

Primera página de esta edición

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