Rivalidad EE.UU. versus China Se Agudiza

Obreros, Soldados y Marineros Debemos Convertir las Guerras por Ganancias de los Capitalitas-Imperialistas en Revoluciones Comunistas

La propuesta Un Cinturón Una Ruta combina el Cinturón Económica de la Ruta de Seda con la Ruta de Seda Maritima del Siglo 21

“Un ejército es construido para combatir”, declaró el presidente chino Xi en un reciente discurso importante. El enfoque del Ejército de Liberación del Pueblo Chino (ELP) debe ser en “cómo ganar”. Días después, la fuerza aérea china simuló un bombardeo a Guam y Hawai.

Mientras tanto, el presidente estadounidense, Trump, tontamente les dijo a los funcionarios japoneses, “Nunca imaginé que tuviéramos tantos países”.

El discurso de Xi marca un cambio dramático del lema anterior chino de un “ascenso pacífico”. Es un insulto al ELP original, una vez dirigido por comunistas reales, que movilizó a las masas para tomar el poder.

Cuando el EPL era el Ejército Rojo chino, su fuerza provenía de su compromiso de “servir al pueblo”. Practicó el comunismo en su “sistema de suministro”, donde soldados voluntarios recibían sus necesidades básicas en vez de salarios. En la década de 1950, muchos veteranos del Ejército Rojo lideraron las luchas en sus aldeas para avanzar hacia el comunismo.

El Ejército Rojo Chino, dirigido por el Partido Comunista, convirtió la Segunda Guerra Mundial imperialista en una revolución que destruyó el feudalismo y la vieja clase capitalista. Pero grandes errores en la línea del Partido Comunista Chino – el nacionalismo y otras concesiones al capitalismo- lo convirtieron en la manada de explotadores imperialistas de Xi.

Los obreros, soldados y jóvenes, en China y en todas partes, deben prepararse ahora para convertir la Tercera Guerra Mundial de los imperialistas en una revolución para el comunismo.

Un Cinturón, Una Ruta: la Respuesta Imperialista China a la Crisis Capitalista Mundial

Xi prometió convertir al ejército chino en el mejor del mundo para reforzar la Iniciativa de “Un Cinturón, Una Ruta” (UCUR) de los imperialistas chinos. UCUR es un plan de $3 billones de desarrollo de infraestructura para autopistas, ferrocarriles, puertos y plantas de energía.

UCUR busca asegurar el petróleo del Golfo Pérsico para China mediante rutas terrestres. En tiempo de guerra, esquivaría ‘cuellos de botella’ de transporte marítimo controlados por la Marina estadounidense. También asegurará el comercio de China por tierra con Asia, el Medio Oriente y Europa, a la vez que reducirá el tiempo y el costo del transporte. Las autopistas amplias servirán un “doble propósito” como pistas de aterrizaje de aeronaves y transporte del ejército.

Los imperialistas chinos necesitan UCUR para competir con éxito contra sus rivales imperialistas. Durante 20 años, las inversiones masivas impulsaron el rápido crecimiento de la capacidad productiva del capitalismo chino.

Pero hay una crisis capitalista mundial de sobreproducción. La industria china no ha vendido suficiente mercancías para recuperar esas inversiones. El exceso de capacidad industrial ha dejado inactivas a miles de fábricas, creando un masivo desempleo rural.

La deuda corporativa china es actualmente de alrededor de $18 billones, o casi el doble del PIB (Producto Interno Bruto: el valor total de mercancías y servicios producidos). Para evitar una bancarrota corporativa generalizada, caída en las ganancias y un posible colapso financiero, los capitalistas chinos necesitan recursos naturales más baratos y nuevos mercados. Es por eso que UCUR es crucial para ellos.

En un guiño al “ascenso pacífico”, XI dijo que el sueño de China requería “un ambiente internacional pacífico y un orden internacional estable”. Él es el que está soñando… ¡o mintiendo! El imperialismo chino solo podría reemplazar al imperialismo estadounidense como la potencia mundial dominante en medio de los ensangrentados escombros nucleares de la Tercera Guerra Mundial.

La rivalidad interimperialista es hoy día la principal contradicción en el mundo. Los imperialistas de EE. UU., China y otros están rumbo a chocar. Están dispuestos a sacrificar a cientos de millones de nosotros para defender su sistema de esclavitud asalariada. Solo la movilización masiva para la revolución comunista puede destruir este sistema mortal.

Imperialismo Estadounidense en Declive: De Guerras por terceros a Guerra Mundial

El imperialismo de EE.UU. está tratando desesperadamente y sin éxito de impedir el UCUR con guerras indirectas que desarrolla en la península de Corea, Myanmar, Afganistán, Irán, Kurdistán, Siria, Turquía y otros lugares. Pero los gobernantes estadounidenses están cada vez más aislados en África, América Latina y Europa, así como en Asia. Trump está en Asia buscando alianzas militares con Japón, Australia e India, aunque sin una estrategia coherente.

El imperialismo estadounidense ha declinado constante pero dramáticamente desde la Guerra de Vietnam. Sus dos guerras petroleras en Irak solo han fortalecido a los capitalistas chinos, rusos e iraníes. Incluso los gobernantes sauditas, una vez aliados sólidos de EE.UU., ahora están profundamente divididos confrontando las presiones de China y Rusia para que abandonen el dólar estadounidense.

Durante las crisis capitalistas, los imperialistas-capitalistas se vuelven más violentos y despiadados. Pero su crisis es nuestra oportunidad. El capitalismo ha creado miles de millones de enemigos en busca de un mundo mejor. Ese mundo es el comunismo.

El comunismo acabará con los horrores interminables del capitalismo

Las masas internacionalmente quieren un mundo donde produzcamos para satisfacer las necesidades de todos. Un mundo sin fronteras o naciones, donde todos sean bienvenidos en todas partes. Donde construyamos nuevas viviendas, rompiendo los barrios segregados y marginales, con sus favelas horribles que encarcelan a los trabajadores.

Un mundo sin el sistema salarial que constituye la base material del racismo y sexismo. Un mundo donde el poder de los trabajadores elimine la policía racista, los tribunales y las cárceles y los capitalistas que los utilizan para aterrorizarnos.

Para conquistar este mundo, necesitamos que el Partido Comunista Obrero Internacional (PCOI) movilice para la revolución comunista. “Soy una nueva miembra orgullosa del PCOI”, dijo una joven en Sudáfrica. Ella agregó: “Estoy aquí en el PCOI por ustedes y porque los capitalistas no ofrecen solución alguna. Estoy aquí para dedicarle mi vida al Partido”.

Debemos concentrarnos en reclutar en las concentraciones industriales y en el ejército. La mayoría de los soldados son jóvenes con un futuro sombrío. Muchos están abiertos a las ideas comunistas a pesar de la fuerte propaganda nacionalista. Camaradas en Sudáfrica recientemente distribuyeron 200 Bandera Roja a los soldados, haciendo varios contactos. (Ver carta de México, página 11).

Los lectores de Bandera Roja deben ingresar al Partido y juntamente con camaradas construir colectivos para animarse mutuamente a luchar por las ideas y prácticas comunistas. Eso fortalecerá nuestra resolución y confianza. Debemos pasar más tiempo con quienes nos rodean: visitas, eventos sociales, grupos de estudio e involucrar a amigos en trabajo comunista masivo.

Los tiempos lo exigen. El potencial está en todas partes. ¡Pensemos en grande! Constuir un ejército rojo internacional.

Primera página de esta edición

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