El Comunismo Depende de las Masas Movilizadas Para la Seguridad, No del Fascista FBI
SEATTLE, EE.UU., 18 de mayo– “El problema no es quién dirige el FBI”, dijo un compañero de Boeing a sus compañeros de trabajo. “¡El problema es el FBI!”
El FBI es la Oficina Federal de Investigación de EE.UU. Trump acababa de despedir al jefe del FBI, James Comey, que estaba investigando los vínculos entre la campaña electoral de Trump y el gobierno ruso. Los medios capitalistas habían estado publicando “revelaciones” sin parar. Todavía lo están haciendo.
Nuestro camarada comenzó a hablar del historial racista, anti-obrero y anticomunista del FBI. Un amigo lo interrumpió con una lista propia. Desde los comienzos anticomunistas hasta el sabotaje de los movimientos progresistas y el asesinato de sus líderes, él lo sabía todo. (Esta información está disponible en www.ICWPRedFlag.org)
Acordamos que el FBI es nuestro enemigo. Pero, ¿es una fuerza policial estatal como el FBI un mal necesario?
El ala principal de los imperialistas estadounidenses piensa que sí. Estos neoliberales sólo quieren tenerla firmemente bajo su control. Todos los capitalistas e imperialistas del mundo quieren lo mismo.
Los principales medios de comunicación, cuando hablan de Comey y la conexión de Rusia, constantemente hacen mención del escándalo Watergate de 1973. Durante Watergate, los imperialistas de antaño destituyeron al presidente Nixon con una campaña cuidadosamente orquestada centrada en revelaciones en el New York Times y The Washington Post. Gerald Ford lo sustituyó, con Nelson Rockefeller como vicepresidente.
Hoy los imperialistas neoliberales están tratando de ponerse al frente de los millones en las calles. Están tratando de acorralar, en comités y tribunales gubernamentales, la explosión masiva contra el sexismo, la islamofobia y el racismo (anti-negro y anti-inmigrante).
Les encantaría recrear la magia de Watergate: ejercer un firme control sobre los órganos del gobierno, disciplinar a aquellos (como Trump) que se van de la lengua con respecto a sus planes fascistas, a la vez disipan la ira justificada de las masas haciéndolas confiar en las instituciones democráticas. Pero la continua crisis global del capitalismo ha hecho que esto sea difícil de lograrse.
Esta crisis también ha agudizado los conflictos entre los imperialistas al punto de que importantes personajes dentro de los gobernantes estadounidenses están pensando seriamente irse a la guerra con Rusia. Trump está comprometiendo la capacidad de estos de hacerlo. Esto también es parte de la lucha contra Comey.
Como nuestro amigo en Boeing, muchos obreros saben que no tienen intereses propios en esta pelea. Pero sí tenemos una pelea: la lucha por el comunismo. ¿Cómo garantizamos la seguridad – y el éxito final – de la nueva sociedad comunista?
La Seguridad Comunista Depende del Partido Movilizando a las Masas
En el comunismo, el Partido Comunista Obrero Internacional (PCOI) movilizará a las masas para garantizar la seguridad. Ese será nuestro principio rector. No dependeremos de una fuerza policiaca estatal.
Comenzando con el Partido, construiremos colectivos fuertes. Esta perspectiva colectiva se extenderá no sólo a la producción, sino al resto de la sociedad. Con las masas movilizadas garantizando que todos tengamos lo que necesitamos, vamos a conocernos más.
“No te metas en lo que no te importa “ no es un principio comunista. La sociedad comunista hará mucho más difícil que las fuerzas contrarrevolucionarias operen. Eso incluye xenófobos racistas, supremacistas blancos como el asesino en Portland, Oregón (ver recuadro) y terroristas como los bombarderos de Manchester.
Sin embargo, la historia nos ha enseñado que los capitalistas y sus agentes no pararán ante nada para organizar fuerzas contrarrevolucionarias (mientras el capitalismo exista en cualquier parte). La acción espontánea de las masas en defensa del comunismo no está a la altura de una contrarrevolución organizada. Enfrentaremos a amenazas reales y peligrosas.
Para movilizar a las masas para hacer frente a estas amenazas se necesitará algún tipo de fuerzas de seguridad organizadas y entrenadas. Estas estarán armadas cuando fuera necesario y serán capaces de actuar rápidamente en emergencias. Pero ese no será su trabajo principal o de tiempo completo. Al igual que todo el Partido, tendrán que movilizar a las masas mismas para hacer frente a cualquier situación.
Por ejemplo, supongamos que algunos contrarrevolucionarios tomaran rehenes y se parapetaron en un edificio, disparando contra los transeúntes. (En A través de la Revolución Rusa, Albert Williams describe un evento similar, en Vladivostok). Las fuerzas de seguridad acordonarían el área y, trabajando con otros colectivos liderados por el Partido, organizarían a trabajadores armados para sitiar el edificio. Entonces podrían intentar negociaciones, o lanzar un asalto.
Muchos miembros del PCOI han participado en o han dirigido ataques físicos masivos contra racistas, neonazi y xenófobos organizados. ¡Usualmente, la policía arresta a los combatientes anti-racistas y protege la escoria fascista! Naturalmente, no podemos evitar bajo el capitalismo que estas lacras sigan emergiendo, pero es buena práctica para las masas y el Partido, para cuando podamos erradicarlas de una vez por todas. Aprovecharemos las oportunidades para hacerlo.
Ultimadamente, la seguridad que buscamos no es vivir en paz en nuestras propias vidas, separados de las vidas de los trabajadores del mundo. Tampoco es nuestra meta proteger la nación. Buscamos difundir el comunismo en todo el mundo y acabar con las naciones y las fronteras. Hasta entonces lucharemos para dirigir a las masas para garantizar la seguridad expandiendo el comunismo más allá de nuestras “zonas liberadas”.
El liderazgo político no está separado del liderazgo de seguridad. Algunas personas tendrán más experiencia que otras en asuntos de seguridad, pero desarrollar más comunistas siempre será primario.
El Partido organizará reuniones masivas para hacer frente a amenazas a la seguridad, ya sean de personas o movimientos. No nos esconderemos detrás de investigaciones y leyes secretas, o dejárselo a alguna policía estatal.
Estas batallas organizadas enseñarán a las masas cómo funciona una sociedad comunista, incluso bajo las amenazas más severas. Más se unirán al Partido y las masas se volverán aún más comprometidas con la lucha por un mundo comunista.
Como dijo nuestro amigo en Boeing, “Este es el camino a seguir”.
Derrotar el Fascismo Requiere Valor…. Y Organización Comunista
El 27 de abril, un fascista asesinó a Ricky Best y Taliesin Namkai-Meche en el metro de Portland, Oregón (EE.UU.). Estos dos hombres blancos le hicieron frente a los discursos, racistas y xenófobos de un fascista, dirigidos contra un adolescente negro y un adolescente musulmán. Un tercero fue enviado a la sala de emergencias, pero sobrevivió con la ayuda de una cuarta persona. Su valor y su compromiso con el antirracismo deben inspirarnos confianza en las masas.
El fascista era conocido por los policías. El mes pasado, llegó a un mitin derechista, envuelto en una bandera estadounidense, gritando, “Chin%&^# a todos los negros.” La noche antes de los asesinatos había dado discursos rabiosamente racistas en otro tren. Por supuesto, los policías no hicieron nada. Sirven al capitalismo racista.
En el comunismo, este incidente no hubiera llegado tan lejos. Los colectivos dirigidos por el Partido se habrían asegurado de que este fascista recibiera su merecido mucho antes.
¿Cómo? Todavía no tenemos todas las respuestas. Sabemos que no podemos depender enteramente de acciones espontáneas de las masas, como los del tren de Portland que ahora les llaman héroes. Todo a lo que el Partido exhorte a las masas a hacer debe resultar tanto en eliminar la amenaza como en involucrar a las masas de una manera que ayude a ganarlas al comunismo. No vamos a confiar en policías, leyes o cárceles.
Necesitamos ampliar esta discusión entre los soldados y obreros industriales cruciales (como los siete obreros de Boeing que leyeron los borradores de estos artículos) y entre las masas más amplias que harán la revolución comunista y garantizarán que el comunismo tenga éxito. Damos la bienvenida a cartas y comentarios.