El sábado, tuvimos un evento muy exitoso durante una barbacoa. La asistencia de camaradas rebasó todas las expectativas: llegaron más de 50 trabajadores. Llegaron muchos obreros metalúrgicos de la Compañía Reclam Group. Esta empresa es una de las peores; superexplota a sus obreros, no respeta en lo mínimo las vidas obreras y paga una miseria por trabajos pesados y peligrosos.
La presencia de muchos obreros industriales marcó el tono de un intenso debate sobre cómo el PCOI es diferente de los partidos comunistas del pasado y cómo podemos eliminar a los patrones y su sistema de esclavitud asalariada. Los camaradas que han estado en el Partido por un año pacientemente explicaron que las últimas revoluciones fueron dirigidas por comunistas que creían el socialismo conduciría a la revolución comunista.
La experiencia y el entendimiento correcto basado en el materialismo dialéctico ha demostrado que el socialismo mantiene un aspecto fundamental del capitalismo: la esclavitud asalariada. Esto conduce inevitablemente a un capitalismo total. Nuestro Partido eliminará la esclavitud asalariada y luchará por construir una sociedad basada en las necesidades de la clase obrera internacional.
Estos obreros mostraron su disposición y entusiasmo de ingresar al Partido. Hablamos de seriamente tener con regularidad nuestras propias reuniones. Un compañero, un lector habitual de Bandera Roja, llegó con otras cinco personas. Ellos mostraron interés en el PCOI, e hicieron preguntas interesantes importantes a las cuales respondimos.
Mantendremos contacto con estos compañeros ya que todos vivimos en el mismo vecindario. Nos conocimos cuando éramos líderes de ramas del Congreso Nacional Africano y el Partido Comunista de Sudáfrica. Esta iniciativa puede ser sostenida y podría traer enormes resultados para el Partido. Todos anticipamos ansiosos empezar a trabajar juntos en la construcción del PCOI en esta área.
La mañana después de las discusiones del sábado, leímos el artículo en la primera plana de la última edición de Bandera Roja, “Huelga de Obreros Agrícolas....” Aunque sus autores están lejos, era como si estuvieran presentes durante nuestras discusiones. El artículo proporcionó en forma clara las respuestas que buscábamos. Eso es lo poderoso que Bandera Roja es. Es capaz de responder, de una manera muy simple, pero profunda, a preguntas que parecen difíciles.
El evento del sábado no podría haber llegado en mejor momento. Nos ha ayudado a ganar confianza en nuestras capacidades como colectivo para movilizar a las masas para el comunismo. Nos ha galvanizado a trabajar juntos en el futuro.
Nuestra lucha para ganar ideológicamente a los obreros a la revolución comunista se produjo en el contexto de los ataques racistas contra inmigrantes en Sudáfrica. Decenas de inmigrantes han muerto; sus hogares y propiedades arrasadas y el miedo cunde en las zonas donde viven los inmigrantes. El racismo y nacionalismo son la raíz de estos ataques.
Sudáfrica se encuentra en una profunda crisis económica. Los patrones quieren que los trabajadores sudafricanos crean que están perdiendo sus empleos a obreros de Nigeria, Mozambique, Zimbabwe, Somalia, Bangladesh, etc. No son los inmigrantes los que les quitan sus empleos, sino los patrones que cierran sus fábricas y las trasladan a otros países con salarios aún más bajos que en Sudáfrica. Los patrones temen la unidad de la clase obrera internacional y por eso propagan su ponzoña racista y nacionalista.
Respondimos este ataque racista patronal distribuyendo masivamente un volante llamando a la revolución comunista en las zonas donde viven los inmigrantes. La respuesta fue abrumadora. Muchos obreros levantaron su puño y nos dijeron: “Esto es exactamente lo que necesitamos”.
Un camarada del PCOI que tiene lazos personales con muchos obreros inmigrantes está incansablemente organizando para el Partido. Planeamos tener una manifestación masiva atacando este racismo-nacionalismo virulento y llamando por la revolución comunista.
Basándonos en nuestra experiencia pasada, hemos organizado una escuela comunista de una semana. Estamos estudiando el materialismo dialéctico. Tuvimos una muy honesta y productiva lucha en cuanto al movimiento de conciencia negra. Un compañero, que se ha unido al PCOI, todavía vacila entre el nacionalismo negro y el internacionalismo comunista. Después de ver el DVD del materialismo dialéctico el camarada muy honestamente admitió la naturaleza fútil del nacionalismo negro. Esta lucha cobró aún un sentido más profundo cuando un obrero inmigrante de Botswana defendió la línea de nuestro Partido de que el capitalismo debe ser destruido para erradicar el racismo.
Nuestro Partido aquí es joven, pero los camaradas han demostrado un inmenso compromiso. Estamos aprendiendo que el capitalismo es desigual, y crea oportunidades para el cambio revolucionario. Los camaradas de Sudáfrica realmente han comprendido el sentido de movilizar a las masas para el comunismo y lo están poniendo en práctica.
Como un camarada dijera: “Yo respiro comunismo cada segundo de mi vida. Hablo con estudiantes, obreros, e inmigrantes sobre la necesidad de la revolución comunista. Estuve ciego, sordo y mudo porque creía en el nacionalismo negro. Pero eso era antes, ahora no”.
Este camarada vive en una choza donde el capitalismo le ha hecho la vida una pesadilla viviente.
Se le preguntó al camarada, “¿Cuántos trabajadores crees que podemos movilizar para el próximo gran evento del Partido?”
El contestó “500”.

*******

Contactar con PCOI: icwp@anonymousspeech.com